La alimentación saludable es indispensable para mantener la buena salud del organismo en general. Como dicen por ahí “Somos lo que comemos” de hecho esta frase es muy cierta, una alimentación sana nos ayuda asentirnos más enérgicos y fuertes.
Erróneamente se suele pensar que comer saludable es estar a dieta. Contrario a eso una comida balanceada cuenta con todos los nutrientes necesario. Ingerir los alimentos adecuados está vinculado a un sin número de beneficiospara el organismo. Mantener el corazón sano, estimular el cerebro, reducir la probabilidad de desarrollar ciertas enfermedades y, en definitiva, sentirte mejor son algunos de ellos.
¿Por qué llevar una buena alimentación?
Aunque los principios de la alimentación saludable siguen siendo los mismos. La composición de una alimentación equilibrada se determinada por las características individuales de cada persona, por ejemplo, edad, sexo y su estilo de vida.
Si tu alimentación es rica en alimentos hipercalóricos, azúcares, sal y grasas, pero carece de frutas, verduras, legumbres, cereales y frutos secos, está lejos de considerarse saludable. Una mala alimentación en la mayoría de casos, es la responsable de enfermedades como la diabetes, la hipertensión, afecciones cardiovasculares y del sistema digestivo, anemia y algunos tipos de cáncer e infecciones.
¿Te cuesta cambiar de hábitos?, lo mejor es que empieces con pequeñas acciones. Incluir paulatinamente verduras en cada comida y elegir frutas frescas e hidratarte con agua en vez de gaseosas o jugos artificiales.
Beneficios de la alimentación sana
1. Protege el sistema inmune
El sistema inmunitario es la base de la salud. Su misión es protegerte de todo agente potencialmente dañino, como virus y bacterias, atacándolos cuando entran en tu cuerpo. Mantener una buena dieta, refuerza el sistema de defensas por medio de los nutrientes y vitaminas.
2. Te mantiene fuerte y con energía
Comer alimentos ricos en nutrientes y proteínas es fundamental para mantener los músculos fuertes. Por su parte, tanto a la vitamina D como a muchas de las B también se les atribuye propiedades que favorecen el aporte de energía.
3. Mejora el rendimiento del cerebro
Una dieta rica en verduras, frutas, pescado y frutos secos, ayuda a reducir el deterioro de la memoria, la capacidad de concentración y otras funciones cerebrales.
Comer alimentos ricos en ácidos omega-3 como el pescado, las nueces y los aguacates se traduce en un mejor funcionamiento del cerebro y por tanto un mayor rendimiento y una mayor productividad en el trabajo.
4. Protege el corazón
Algunos alimentos como los cereales integrales ayudan a reducir los niveles de colesterol malo, altamente perjudicial para el corazón. Una dieta saludable implica que es baja en sodio, por lo que seguirla contribuye a mantener la presión arterial en los niveles adecuados.
5. Regula el tránsito intestinal
Las frutas, las verduras y los productos lácteos ricos en probióticos son siempre bien recibidos por las bacterias del tracto digestivo. Por su parte, los alimentos grasos y fritos no son nada recomendables.
6. Mantiene sana la piel
La piel es el órgano más grande de tu cuerpo y por tanto debes cuidarlo. Consumir vitaminas está asociado a la reducción de posibilidades de desarrollar cáncer de piel.
7. Mejora tu estado de ánimo
Está comprobado que existen alimentos que contribuyen a mejorar tu estado de ánimo. La razón es que ayudan al organismo a segregar ciertas hormonas (endorfinas, serotonina) que provocan sensación de felicidad y bienestar.
8. Reduce el estrés
Ciertos alimentos tienen la capacidad de moderar la producción de hormonas que inducen el estrés, tales como el cortisol y la adrenalina. Algunos de ellos como las naranjas contienen vitamina C, mientras que otros como el salmón son ricos en ácidos omega-3.